Transparente

Te espero
y lo sabes.
Tú lo sabes todo.
Sabes de su dolor,
y del nuestro.
Sabes de la agonía
que se le queda en la voz,
en el cuerpo,
en el alma.
Si acaso te importara
podrías sanarle,
pero sólo estás
cuando la risa florece.
Lo dejarás morir,
lo sé, lo presiento.
Lo dejarás morir
y puedes sanarlo.
Eres como un fantasma,
transparente,
invisible cuando quieres...
ausente.
No entiendo
cómo nos llamas amigos
si te llamo
y no vienes.
Si sabes que te necesitamos
y no vienes.
Si se nos está muriendo
y no vienes.
Y no vienes!
No vienes...
No
vienes...

"Sin tanto espacio"

"No hay tanto espacio como se ve. No hay tanto cielo como se ve".
Franco De Vita - Sin Tanto Espacio

Vuela más alto...
Atraviesa los espejos,
extiéndeme tu lengua sedienta
mientras la fortuna se burla.
Vámonos flotando
entre turbulencias,
entre las faldas de las ninfas,
por el mundo
y luego de planeta en planeta
como si no hubiese otra cosa
que tu mano en la mia.

Cartas a Marcelo

Se está bien aquí, Marcelo.
Las hojas, como espejos,
reflejan una carita diferente
igual que las calles.
Sé que te gustaría, Marcelo,
sé que te gustaría.

Está también el río
que viene a recordarme
nuestros tiempos,
que siempre seran nuestros,
entre las risas del parque
y las piedras del río.

Ay, Marcelo, ay!
Está también la brisa,
helada de soledades,
que lame los rostros y los huesos
como la perrita de la vecina,
te acuerdas, Marcelo?

Hace tanto que ya no...
que ya no.
Tengo los labios cuarteados,
y no me queda más
que sonreirle a la vida
que no te sonríe a ti.

Qué lejos estás, Marcelo,
de los árboles de colores,
del río y el parque,
de la brisa carinosa y fría...
de los momentos que fueron nuestros,
y hoy son sólo mios.

Me acaban de Publicar en Clave Digital!!!!

Aqui tienen, queridos amigos, el link para que puedan chequear el articulo con mis poemas en el periódico Clave Digital!!

http://www.clavedigital.com/App_Pages/Ocio/Ocio.aspx?Id_Articulo=4195

Pasen por allá y denme apoyo!!

Los Otros

Agacho la cabeza,
se trepo al avion
y en ese mismo momento
uno se largo de la ciudad
para no volver jamas,
otro saco un cuaderno
y empezo a escribir con lagrimas,
otro se rio a carcajadas
para no ahogarse en la melancolia,
otro se sento frente al mar
a contar gaviotas suicidas,
Y otro se agarro del mango de una guitarra
y la hizo cantar tristezas.
Los otros otros,
ajenos a el cambio que habia dado el mundo,
se volvieron a ella,
dandole la bienvenida,
envolviendola en girasoles,
y dejando a los primeros otros
disfrutar del recuerdo de lo que ahora
era su realidad irrefutable.