Grito (Buscando Desahogarme)




Grito sin paciencia, sin calma.

Grito porque no puedo más,

porque estoy harta, vacía.

Grito porque el cuerpo lo pide,

porque el humo del cigarrillo

no abandona mis arterias.

Grito porque no valen las disculpas,

porque las palabras se consideran vacías,

porque no se pueden borrar de la piel

ni los errores, ni los tatuajes, ni los besos.

Grito porque estoy harta

de ser villana, bruja,

de estar maldita,

de ser comida de peces,

de perder a mis afectos,

de esperar lo que no llega...

Grito de cansancio, de dolor, de soledad...

Grito para poder ser yo ne nuevo.

Confluencia




Tengo una soledad acompañada
de corrientes eléctricas y átomos solitarios,
donde convergen como en un basurero,
lo mejor y lo peor de la humanidad.
Mi soledad no pregunta oficios,
ni números de identidad y electoral
sino que abre sus alas a lo desconocido
para no negarse un poco de compañía.
La electricidad, a su vez,
responde con la misma fuerza de un rayo,
a la velocidad de la luz,
haciendo brotar de mis dedos
palabras instantáneas, diluidas, descafeinadas.
Tengo una soledad que no está sola
una soledad que canta, que sueña,
que resuelve conflictos, que se enoja,
una soledad enamorada y desenamorada,
triste y feliz, triunfadora y derrotada,
que vive a través de otros,
que fluye a través de mi,
hacia el universo de almas solitarias
que se acompañan mutuamente,
repitiendo un ciclo eterno de desamparo
donde al final de cada día
me voy a la cama sola y acompañada.